Llevo bastantes días intentando empezar a escribir este post y no encontraba el momento ni las palabras, abandonándolo a la mitad o incluso en las primeras frases, pero finalmente ha llegado la hora. Estoy escribiendo desde la pantalla de mi móvil en el único lugar en el que me encuentro en paz, la Iglesia de la Paloma. No tiene nada que ver con la religión, ya que hace tiempo que abandoné cualquier creencia, pero la yaya era una gran devota de esta virgen y aquí me siento más cerca de ella. Me siento más solo que nunca y sólo se me ocurre venir aquí y desahogarme en el lugar que era tan importante para la única persona de mi familia que me quiso de verdad. Estoy decepcionado conmigo, no he podido con esto y creo que me he equivocado muchísimo en esta vida. No sé si he tenido mala suerte de nacer en el momento y lugar equivocados, o si simplemente el error he sido siempre yo mismo. Llevo toda mi vida intentando ayudar a los demás, sacrificándome siempre por mi familia e intentando esta...